El mejor árbitro catalán de primera

No seré yo quien cargue hoy contra Alfons Alvarez, el mejor árbitro catalán de la primera división porque no hay ninguno más; ahora ya se le conoce en todo el país. Tras su excelente actuación en la final de la Copa Catalunya, porque así lo pactó y lo 'pasteleó' con el joven presidente-censor de la Federació, Jordi Roche, todos esperábamos que mantuviera su ínmejorable línea de arbitraje en el terreno de juego, pero lo que no puede ser, no puede ser y además es imposible. Alvarez no dio una, ni a derechas ni con su habitual izquierda en el Bernabéu. A quienes le conocemos un poco, como árbitro -personalmente no tenemos el gusto-, no sólo no nos sorprendió sino que 'Míster 'Uó-uó' -por eso expulsó a Kapó el año pasado-, confirmó su historial de siempre: arrrimarse y 'pelotear' con el poder, le pone en órbita. Dicen, quienes saben del entorno arbitral, que si eres insolidiario, 'cagón' y esquirol fuera del campo, dentro del mismo sólo se confirma la tradición. Eso dicen quienes saben de esta materia y 'Míster Uó' no tuvo lo que hay que tener para salir el sábado del Bernabéu como su 'maestro' Enríquez Negreira hacía años atrás. ¡José María! enséñale el camino al 'inspector'. Pero hay que entenderlo. Tras su actual romance deportivo con el censor Roche, ahora está inmerso en provocar elecciones al Comité Nacional de Árbitros. Sí, sí, Alvarez peleará, como lo hizo en Catalunya cuando animó a sus compañeros de regional a ir a la huelga, mientras él pitaba (cobrando, por supuesto), está peleando, insistimos, actualmente con el poder establecido para que los árbitros digan a quien quieren como jefe en las urnas. Ésa fue la razón que le llevó a no pitar la Copa Catalunya en el 2006 aunque se escudó en un lamentable fax para justificar su negativa. Roche se lo perdonó. Aquí no ha pasado nada como tampoco ha pasado nada para el semiprofesional responsable de los árbitros de Catalunya, César Ochoa. Alvarez favoreció descaradamente al grande (Real Madrid) en su partido contra el Almería y volvió al día siguiente en avión como un campeón. El compañero, Ricard Torquemada, (Catalunya Ràdio) comentó que la mañana del domingo le vio junto a su trío arbitral pegados materialmente al móvil y con una sonrisa plena. No es para menos. El protegido del joven presidente-censor ha demostrado que es el mejor árbitro catalán de primera. ¡¡¡Grande!!!