Llevaba varios días pensando si escribir algo sobre el colegiado catalán. Álvarez Izquierdo. Pensé que lo mejor, aunque seguro que estas palabras no le iban a afectar lo más mínimo, era callar, no escribir, no decir nada. Alfons Alvarez no es un mal árbitro. Seguro que la internacionalidad la tiene a la vuelta de la esquina aunque bien hará Álvarez en recordar que los únicos que han sacado la cara por él han sido sus colegas de Catalunya. Leer el comunicado de su presidente, César Ochoa, solidarizándose con el árbitro es lo mínimo que se le tiene que pedir, pero 'Alfonsito' aún es la hora que escuchemos a tu 'jefe' Sánchez Arminio.
¿Por qué no sales públicamente, ya que no tienes que esconderte de nada, y dices que el silencio del cantabrón o de tu amigo Díaz Vega es una bofetada tan desagradable como esperada? ¿Por qué no sales y les agradeces a tus colegas catalanes que te defiendan públicamente?¿Por qué no te atreves a salir y decirle a Arminio y Villar que te han dejado más solo que la una? ¡Ah! ¿que te han llamado para decirte que están contigo? Bien, vale, de acuerdo. Si a tí te vale, a mí también.
Dicen los entendidos, entre los que yo no estoy, por supuesto, que eres un árbitro tan malo, tan malo, que eres capaz de montar cualquier show y darle la razón a esos impresentables entrenadores que siempre buscan malas excusas porque Schuster no deja de ser sino un impresentable deportista. Pero, querido compañero, tú mismo con tu mecanismo y, si no te convencen Arminio y Villar, te puedes declarar en huelga o pedirles, por escrito, un tiempo de descanso que no de 'nevera'. A la huelga, Alfons, a la huelga. No sería la primera vez.
Última hora: Leo con interés las declaraciones de Victoriano a mi compañero Gabriel Sans donde certifica que su gabinete de abogados ha desistido de cursar una denuncia al Comité de Competición "porque la insinuación no es punible". Aún así, censura con dureza la actitud del técnico blanco y confía en que el Real Madrid no pase por alto comentarios que calificó de "tonterías", de "una grave falta de respeto" y que "nos resbalan". Arminio siempre ha destacado por su contundencia. Álvarez ya puede respirar más tranquilo porque su 'jefe' ya ha dado la cara por él. Ahora te toca decirle a Villar que convoque elecciones al comité y quedarás como lo que eres, un crack.