La ley de protección de Datos va a poner a Jordi Casals y a su junta en su sitio. Ese empecinamiento comercial en condicionar las licencias de los futbolistas catalanes con la información de su dirección telefónica y de sus teléfonos móviles ha hecho que ‘El Diablo’, Miguel García, vuelva a darle un toque a un presidente que cada día pierde el poco crédito personal y deportivo que tiene.
Tras enviarles una circular donde amenazaba a los clubs que, si no daban esa información, no podrían darse de alta –de hecho, Intranet no aceptaba la ficha si no se llenaban esos apartados-, Garcia les instó, por carta, a reestudiar el asunto o acudiría los tribunales. Casals se acobardó, como es habitual, despidió un par de empleados para seguir su línea democrática, e hizo caso omiso hasta que García volvió a dar un nuevo toque. Y, he aquí, que Casals, con fecha del pasado viernes le entra el canguelo y ahora dice otra cosa: “En caso de tener alguna dificultad para obtener la información que se pide a la hora de tramitar la licencia, os pedimos que informen por escrito de los nombres y apellidos de los jugadores que no disponen de teléfono o correo electrónico, y desde la Federación haremos el trámite para la obtención de la licencia”
¡Im…presionante! Lo que hace dos meses era condición indispensable, ahora se baja los pantalones el señor presidente porque el señor García le dice que está incumpliendo la Ley de Datos e incluso la Ley de protección de los menores ya que la mayoría de los futbolistas son menores. Pero, ojo con el señor presidente, que este domingo ‘lloraba’, hombro con hombro, con el presidente de la Gramenet, Rafael Osuna, porque el presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, les tiene que pagar el ‘regalo’ del generoso Laporta. Rosell pagará, pero ‘mearán’, con perdón, sangre Don Casals y don Torres.
Pero no me quiero desviar. El presidente recula y le dice al 'Diablo' el viernes que le diga los nombres de los chavales que no tienen teléfono. ¿Acaso piensa darles la Federació un móvil y, especialmente, habilitarles una dirección electrónica sin que se entere el club? ¿Se atreverá Casals?. La respuesta de Garcia, sólo horas después, fue clarita y, junto a una relación de ¿200 chavales?, porque no han tramitado ni una sola licencia, dice: “Apercibiéndoles que si por su empecinamiento de no anular esos campos que entendemos no deberían ser obligatorios, sino voluntarios, para la tramitación de la licencia federativa via intranet, tomaremos las medidas, tal y como les venimos diciendo reiteradamente, que en derecho nos puedan asistir, haciendo al presidente de la FCF responsable de cuantos prejuicios se pudieran ocasionar, tanto a los deportistas, a este club e incluso a la propia competición”
Atención a la nueva movida del ‘Diablo'ya que puede poner al generoso y sacrificado Casals en la picota. Y, que sepan todos los directivos que aplaudirán este lunes a su presidente aunque no se enteren de nada ni se les consulte nada porque no pintan nada –el primero, Subíes-: todos son y serán co-responsables de los caprichos del Jefe y del Polichinela.
Una cosa más: el año pasado hubo reportaje fotográfico en la Diada Nacional de Catalunya. Esas banderas, esa entrega, esas caras iluminadas han desaparecido. La Federació se limita a escribir una pequeña nota en la web y ni una sola foto no vaya a ser que el jefe del fulbol (Villar) recorte dietas. Eso es cobardía
