diumenge, 10 d’octubre del 2010
Las mentiras tienen ‘las patas muy cortas’
¡Vaya domingo 10! Escucho, como siempre, mi emisora favorita (Radio L’Hospitalet), la Radio de mi pueblo y, por primera vez, me han sacado de mis casillas. Bueno, especifico: me ha sacado de mis casillas escuchar al presidente pelota que hay en la Federació Catalana.
Jordi Casals dedicó este domingo ‘las mejores horas de su vida’ a visitar a su compañero de junta, Lluís Dorado “ya que aún no había ido a Pubilla Casas”. Hasta aquí maravilloso. ¡Clink , clink… kilometraje!, pero ya me parece bien. Es lo que prometió y lo está cumpliendo y es lo que tiene que hacer un buen presidente. Lo que no tiene que hacer un buen presidente es enmascarar la verdad. O dicho de otra manera. O estamos ante un mentiroso con recaidas o ese mentiroso se llama Miguel García, presidente del CE L’Hospitalet.
Mis queridos compañeros de Radio L’Hospitalet se acercaron a Casals, como tiene que ser, para hablar con la máxima autoridad del fútbol catalán. Tras sacar pecho por las “131.000 licencias que tenemos” (nunca dirán los clubs que se dan de baja), luego se escondió y no dijo la verdad en el momento en el que le preguntaron cuando irá a La Feixa Llarga.
Se acogió al discurso victimista, cobarde y ruín que tiene escrito y empezó a llorar. “Siempre estoy dispuesto a hablar con todo el mundo y con vosotros (Radio L’Hospitalet) también. El Hospi merece todos mis respetos y, cuando me conviden, yo estoy en disposición de ir”. Más lloros, más lamentos. “Con todos los respetos, no quiero entrar en ninguna polémica con este señor (García) porque es lo que él quiere. Con el Hospitalet estoy encantadísimo”. Más mocos, más lágrima fácil: “Que se me convide y no tengo ningún problema para ir a La Feixa Llarga”. No obstante, el ‘primer ministro del fútbol catalán’ puede tener problemas: “Si mi agenda me lo permite, iré. Lo que no puede ser es invitarme el jueves para ir el domingo”. Y más palabritas para que 'El Diablo' García se enternezca: “Quien quiere confundir y quien quiere problemas es este señor ya que a la ciudad la respeto”. Y se quedó más ancho que una col.
Una de dos: o miente Casals o miente Garcia. El presidente ribereño, que tiene tantos defectos como virtudes, guste a quien guste o no guste a quien no guste, cursó invitación al presidente de la Federació con motivo de la promoció de ascenso a segunda B la temporada pasada. Casals –lo diré de manera fina- se asustó, reculó, se ahogó por su propia testiculina. Por otro lado aparecieron unas desafortunadas pancartas en La Feixa Llarga, sí, desacertadas pancartas que nunca justifican la cobardía de un tipo que lanza la piedra y esconde la mano.
Hace pocas semanas se vieron los dos y ahí está la fotografía que lo demuestra. ¿Quién miente? ¿Casals o García? ¿A qué están jugando? García da la cara, con todos sus defectos y virtudes y habla con todo el mundo que le quiere escuchar. Casals ya ha demostrado que es un cobarde. Lo único que hace falta es saber si se acoge también a la mentira. Ahora le toca contestar al mandamás ribereño. ¡Con lo fácil que sería verlos a los dos en el palco de La Feixa Llarga! ¿Por qué no lo hacen? Se lo diré yo: 'El Diablo' tiene, bajo mi modesto punto de vista, muchísimas carencias, pero tiene una gran virtud que Casals ni conoce. Miguel García da la cara, no es cobarde. Y, ojito, porque las mentiras tienen ‘las patas muy cortas!.