Este viernes 19 es muy importante para mí. Y, se dirán ustedes, ¿a nosotros qué nos importa? Pues, si piensan así (que lo respeto y entiendo) no lean más. Digo que es o ha sido muy importante para mí porque, de alguna manera, hemos vuelto a la radio, a Onda Rambla, a la gran Onda Rambla donde ya tuvimos honor de compartir micrófono hace muchos años, y de haber podido hablar con uno de los presidentes que más me ha enseñado desde que estoy en este mundo del fútbol y sólo le he visto (y comido) una vez en toda mi vida. Ahí está Alonso Conejo, presidente del Marianao Poblet para decir si miento.
Lo de la radio ha sido maravilloso. Perdónenme. No es una 'gilipollez', de verdad. Quienes llevamos la radio en la sangre, quienes hemos sufrido todo tipo de amenazas y alegrías por decir lo que pensamos, no podemos estar con la boca cerrada cuando vemos que todos los medios de comunicación PÚBLICOS pasan de nuestro fútbol catalán y eso que tienen grandes profesionales en su nomina. No digo nada de los medios privados porque se juegan su dinero aunque aplaudo a los que, como ONDA RAMBLA, te ofrecen toda Catalunya para trabajar y hablar de fútbol catalán, algo que a los políticos sólo parece importarles cuando se juega la final de la Copa Catalunya y, especialmente, si está el Barça aunque sea lleno de jugadores filiales.
En este primer programa el presidente de la Federació Catalana, Ricard Campoy, ha dicho que en el 2006 los gastos de la Fundació de la Federació estuvieron sobre los 230.000 euros de los que un 14% fueron para ayudar a niños necesitados, un 6% de beneficio y el 80% restante para pagar gastos de gestión (empleados, alquileres, publicaciones.....) ¡Qué bestialidad! Además, nos hemos enterado que la FCF negocia con Croacia y Colombia la posibilidad de jugar en Navidad. Seguro que la semana que viene, con el asunto de las REVISIONES MÉDICAS, se dará mucho más juego. Espero sus observaciones en redaccio@futbolcatalunya.com
Voy con Alonso Conejo. Hoy he estado hablando un poco con este hombre cargado de sentido común y sencillez. No tendrá el 'glamour' de muchos colegas suyos, mejor así, pero tiene muy claro el menor común de los sentidos y esa sencillez que le hacen grande. Por eso, cuando vas a su campo, no encuentras nadie que 'raje' del 'presi'. Será por algo. Por cierto, los mejores' bocatas' del circuito catalán de fútbol están ahí. Un día cualquiera entrevistaremos a la jefa/e del bar para que nos explique sus secretos
